Set de acuarelas con paleta, block, pincel y lápiz - Mont Marte Kids

Set de acuarelas de 16 piezas.

Un kit completo para que los peques descubran el mundo de la acuarela de forma práctica y divertida.
Incluye una paleta con 12 colores vibrantes, un pincel con depósito de agua (¡ideal para pintar sin vaso!), un lápiz de grafito y un libro con hojas gruesas especiales para acuarela.

Permite que tu pequeño artista se sumerja en el mundo de la acuarela con nuestro el set de acuarelas de 16 piezas de Mont Marte.

Incluye:

• 12 pasteles de acuarela brillantes
• una paleta
• un pincel de acuarela con depósito de agua
• un lápiz de grafito
• un block de hojas para acuarelas A5 con 15 hojas

¡Para que tengan todo lo necesario para empezar a crear! Con el cepillo de agua incluido y una paleta, la creación resulta cómoda para manos pequeñas.

Este es un excelente juego de introducción a la pintura de acuarela que disfrutarán los pequeños artistas.

DETALLES ADICIONALES:

12 pasteles de acuarela brillantes en paleta: blanco, amarillo, amarillo anaranjado, rosa, magenta, morado, ultramar, azul oscuro, verde manzana, verde, marrón, negro. Cuenta con un diseño de paleta moldeada y un cepillo de agua de cerdas de nylon, de fácil agarre y uso.

Instrucciones: Simplemente desenrosque la parte superior del cepillo en el sentido de las agujas del reloj y llene el depósito con agua antes de volver a atornillarlo firmemente.

Una vez asegurado, aplique una ligera presión al depósito para comenzar a fluir agua hacia el pincel y comenzar a pintar.

Edad recomendada: A partir de 4 años

Por qué importa la calidad en los materiales de arte infantiles

1. Seguridad
   Los materiales de baja calidad suelen tener pigmentos o componentes tóxicos (metales pesados, solventes, ftalatos). Los niños pequeños exploran con todos los sentidos, incluso la boca, así que la seguridad es lo primero: pinturas al agua, sin solventes, no tóxicas y lavables.
2. Experiencia sensorial y resultado
   Los buenos materiales (pinceles con buen pelo, papeles con gramaje adecuado, pinturas con pigmentos reales) responden mejor: se deslizan, mezclan y cubren bien. Esto evita frustración y favorece el disfrute del proceso.
   → Un lápiz que no pinta o un pincel que se dobla interrumpen la concentración y la sensación de “puedo hacerlo”.
3. Valor pedagógico y emocional
   La calidad transmite respeto: “lo que hacés importa”. Cuando el adulto ofrece buenos materiales, el niño siente que su creación tiene valor. Es una forma concreta de validar su expresión.